1. Dar un paseo por la plaza Damm: Uno de los emblemas de la ciudad, es una plaza inmensa situada en el centro de la ciudad y con muchos Coffee Shop cerca. Si, sabemos que a Amsterdam se va a lo que se va, pero no pasa nada por quitarse un rato de fumar para ver las partes bonitas de la ciudad.
2. Hacerse una foto con las letras: Porque nos encanta el postureo, y nadie se va de esta ciudad sin hacerse una foto con las letras ni haciendo el tonto subiéndose encima de alguna o al lado de tu inicial, si eres uno de los afortunados cuyo nombre empieza por alguna de las letras que está.
3. Ir a un Sex-shop: Porque Amsterdam está llena de ellos, e incuso puedes ir a la condomerie, donde venden preservativos de lo más peculiar.
4. Tomarte un brownie de marihuana: Con lo que están de moda los brownies y los cupcakes, si te gustan normalmente los de aquí te gustarán más.
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5. Ir al mercado de las flores: Otra de las zonas más famosas de Amsterdam, los puestos pequeños de floristerías se unen para formar una calle preciosa y llena de color que alegra la vista de quien pase por allí.
6. Ir al barrio rojo: El mundialmente conocido barrio rojo, te recomiendo que sólo vayas a mirar si no quieres que el viaje se te salga de presupuesto.
7. Ponerte de setas: Otra de las cosas que son legales en Amsterdam son las setas. Hay de todos los tipos: de la risa, alucinógenas... Hay que consumirlas con sumo cuidado, y preguntar al de la tienda cualquier duda que tengas, no tendrán problema en responderte e incluso darte algún folleto.
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8. Fumarte un porro en un Coffe Shop: Básicamente la única razón por la que fuiste a Amsterdam, prueba en el Bulldog que es el primero de Amsterdam en activo.Además, no hay nada como pedir porros en la barra de un bar sin preocuparse de policía y demás.
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